sábado, 13 de diciembre de 2014

DIEZ COPLAS DE AMOR Y DESGARRO



Poesía de Carmen Martín Gaite.
  
     Allí dónde estés, Carmencita Carmiña, me queda pendiente para ti agradecerte estas maravillosas coplas tan del pueblo y sacarles la mejor melodía o canción que encuentre, y invitar a los amigos de aquí y demás pa yá a que las hagan, y que suenen aún más y más lejos. Y las hagan honor:  como tú lo conseguiste, cazar sin cazar, a ese imposible que es el Amor tan con mayúsculas. Coplas qué tan tuyas, tan mías a su vez, al viento, se vuelvan al común: coplas y desgarramientos. 





1
 
Al alba, 
me deperté, amor, al alba 
y qué sola me sentía 
mirando cuajarse el día
y aquel poquito de malva
que por naciente venía.


2

No quiero riquezas vanas;
de tu mano donde vayas,
amor, yo quiero saltar
todas las barreras payas
y las hogueras gitanas
que el mundo nos quiera echar.


3

 Charlatán embacuador,
qué me importa si fingías 
con tus palabras de amor.
Para aquellas penas mías 
no hubo bálsamo mejor,
amor, ¡qué bien las decías! 


4

Desde que vino el verano
hay una hoguera apagada.
Toco tu pelo y tus manos
y oigo tu voz, pero en vano
te busco ya la mirada.



5

Escucha lo que te digo,
compañero, dulce amigo
de sinsabores y empeños:
No te dé Dios más castigo
que tener a otra contigo
cuando me llames en sueños.


6

¿Te acuerdas, amor, de cuando
sólo querías mi alegría?
Ya te di cuanta tenía.
¿Para quién estoy llorando?
De poco me serviría 
saber adónde te mando
esta cuenta tan baldía.


7
 
Te invoco desde la ira
y desde la soledad:
ven a mis ojos y mira 
que sólo vendo verdad;
si quieres comprar mentira
¡largo de mi tienda ya,
que solo aquí sobra y se tira!


8

Crees que están tocando al olvido,
sin despedirte te vas,
ninguna cuenta te pido.
Pero no mires atrás,
si quieres no volver más,
que en la fuga vas herido
y un rastro rojo verás. 

9

Si llegara hasta tu oído
por algún extraño acaso 
que publico que te olvido,
amor, tú no hagas ni caso.
Son ganas de meter ruido,
miedo de dormir al raso,
¡qué más hubiera querido! 


10

Del azar ya nada aguardo;
lo dulce con el veneno
me lo echo al hombro en un fardo.
No sé si el camino es bueno,
no sé si tardo o no tardo,
dónde voy, ni por qué peno.

...


No hay comentarios:

Publicar un comentario